Medio Ambiente envía un helicóptero desde Alicante, hay problemas de agua en pequeños núcleos y los ganaderos temen no poder alimentar a la cabaña Las llamas se ceban con las zonas altas y los pastizales secos en 28 concejos
Vientos de componente sur, termómetros por encima de los veinte grados y un invierno parco en lluvias con el suroccidente y las zonas altas de montaña. Esa combinación fatal para Asturias desencadenó ayer 95 incendios forestales a lo largo de 28 concejos. Cerca de 300 efectivos de distintos cuerpos combatieron las llamas en una jornada de infarto. Al cierre de esta edición restaban 55 focos activos, algunos «de muy difícil extinción», según admitían bomberos desde el frente de Cangas de Onís. El fuego se localizaba en zonas elevadas y pastizales secos, alejadas por tanto de los núcleos de población.
A los noventa efectivos de Bomberos de Asturias entre mandos y personal de intervención, se sumaron 121 peones procedentes de treinta empresas y cooperativas forestales contratadas para batallar contra el fuego. El Ministerio de Medio Ambiente movilizó también a los veinte integrantes de la Brigada de Refuerzo con base en Tineo y el Principado añadió 32 guardas de Medio Natural.
La dispersión del fuego y su localización en cotas altas exigían un refuerzo del dispositivo aéreo, lo que convenció al Ministerio de Medio Ambiente para traer un helicóptero especial que tenía en Alicante. ES un bombardero HK con capacidad para lanzar 4.500 litros de agua, capacidad similar a la de otra nave que viene trabajando desde la base tinetense. Bomberos de Asturias, por su parte, puso a trabajar a tres helicópteros que eyectan mil litros, otro biturbina que ejerce de coordinador, y una avioneta 'rally' de vigilancia. En total, el 112-Asturias coordinaba ayer el despliegue de ocho aeronaves.
La previsión meteorológica para hoy anticipa también calores y vientos flojos del Sur y del Este, datos que movieron al Principado a fijar el riesgo forestal en su nivel 4. El 5 es el más alto de la escala. La decisión supone que quedan prohibidas todo tipo de quemas, incluso las que estuvieran autorizadas para estas fechas, lo que parece aún más justificado tras lo visto ayer. De hecho, efectivos de bomberos que estuvieron trabajando en el Oriente aseguraron a la TPA que en uno de los focos encontraron restos de gasolina. Las llamas habrían prendido en un bosque de eucaliptos recién cortados y «todo apunta a que el fuego pudo ser provocado».
Tradicionalmente se quema más tierra en Asturias en febrero y marzo, fenómeno que la principal investigación realizada por el Instituto de Recursos naturales y Ordenación del Territorio atribuye al 'fuego pastoral'. Tras revisar los resúmenes y denuncias cursadas en la región durante 30 años, los científicos concluyeron que el 70% de los incendios asturianos fueron provocados por ganaderos y pastores que pretendían despejar tierras para que ahí germinase alimento para su cabaña. Habría que añadir un 8% de quemas contra el matorral.
La práctica puede tener cierta lógica en años de lluvias, cuando el monte está repleto de matojo y combustible, cosa que no ocurre ahora. Asturias ha superado uno de sus inviernos más secos en parte de la región: en Degaña, por ejemplo, lo habitual era recoger en enero doscientos litros de lluvia por metro cuadrado , mientras que en esta ocasión sólo cayeron 35,4, según datos de la Agencia Estatal de Meteorología.
En este contexto, la combinación de calor y fuego puede agudizar aún más dos problemas que empiezan a asentarse en el Principado: el desabastecimiento de agua en algunos núcleos y la ausencia de pastos. «Como esto siga así, en dos meses estamos en alerta roja», advierte González Braña, alcalde de Villanueva de Oscos, preocupado por la suerte de los núcleos de Cimadevilla -«desde enero les suministra el agua una autobomba»- y Cotarelo -«ya con medidas de restricción»-. «No hay pastos, el subsuelo está seco y los manantiales no brotan; en enero adelantamos el silo que teníamos, confiando en las lluvias que no llegan. Ahora la preocupación es inmensa», confirma Mercedes Cruzado, de la COAG.
fuente : http://www.elcomercio.es/prensa/20120328/asturias/calor-causa-incendios-20120328.html
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